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Confirman la presencia de una tierra en la estrella más siguiente al Sol

En 2016 el Equipo del español Guillem Anglada-Escudé descubrió que hay un mundo similar a la Tierra en la estrella más cercana al Sol. Aquel descubrimiento despertó una intrigante pregunta: ¿Podría ser que haya un mundo habitable a la vuelta de la esquina, en términos astronómicos? Los cálculos revelaron que este exoplaneta, de nombre Próxima b, tiene un masa 1,27 veces mayor que la masa de la Tierra. De la misma forma se averiguó que es un planeta rocoso que gira muy cerquita de su estrella, Cercana Centauri, una enana roja muy poco brillante situada a 4,22 años luz de distancia. La pregunta sobre si es que Siguiente b es habitable o bien no Aún se ha contestado, Sin embargo esta semana un conjunto de estudiosos de la Universidad de Ginebra (Suiza), entre otros, ha confirmado el hallazgo de Guillem Anglada-Escudé con una precisión mucho mayor. Su investigación es fruto de una de las primeras observaciones de ESPRESSO («Echelle SPectrograph for Rocky Exoplanets and Stable Spectroscopic Observations»), un nuevo instrumento montado en el observatorio VLT («Very Large Telescope»), en las instalaciones del Observatorio Europeo Austral (ESO), en Chile. Sus conclusiones se han publicado en «Astronomy & Astrophysics». «El resultado que presentan no es nuevo Pero sí importante», ha explicado a ABC Ignasi Ribas, investigador del Instituto de Ciencias del Espacio (ICE-CSIC), no implicado en el estudio. «Se trata de la confirmación independiente del hallazgo de Cercana b hace cuatro años. Se ha hecho usando un instrumento mucho más potente que el que empleó Guillem Anglada-Escudé en 2016, llamado HARPS, y los nuevos resultados concuerdan al dedillo». ¿Un sistema solar en Cercana Centauri?
Los astrónomos, dirigidos por Alejandro Suárez Mascareña, han concluido que Próxima b tiene Al afín que mínimo 1,17 masas terrestres. Han confirmado que está dentro de la zona habitable de su estrella, lo cual quiere decir que puede tener agua líquida en superficie Porque no está ni muy lejos ni muy cerquita de ella, con relación a la radiación que emite. En concreto, Cercana b está siete veces más alrededor su estrella que Mercurio del Sol, y apenas tarda 11,2 días en llenar una vuelta de la estrella. Además de confirmar su masa, los astrónomos han captado una distorsión que les hace sospechar que Siguiente b podría contar un compañero, en una órbita más cercana a la estrella, Aunque no han podido asegurarlo: «Si la señal tiene un origen planetario– ha explicado en un comunicado Francesco Pepe, estudioso de la Universidad de Ginebra y coautor del trabajo– este planeta acompañando a Cercana b tendría menos de la tercera parte de la masa de la Tierra –es decir, sería un poco más masivo que Titán–». O sea, aun en la estrella más cercana podría haber un sistema solar en toda regla. «Estas estrellas tan pequeñas y frías que suelen tener sistemas planetarios numerosos», ha dicho Ignasi Ribas. «Tal vez Cercana Centauri no sea una excepción. a su vez, hace un tiempo otros autores propusieron la existencia de otro planeta de largo periodo en el sistema. ¡Es apasionante que nuestra estrella vecina pudiera disponer un sistema planetario tan rico!». «¡Es apasionante que nuestra estrella vecina pudiera disponer un sistema planetario tan rico!» Cuando las estrellas cabecean
Hoy por Hoy, la inmensa mayoría de los exoplanetas se ha descubierto por el método de los tránsitos. Los tránsitos son los pequeños eclipses que se producen En el momento en que los planetas «hacen sombra» al pasar por delante de sus soles y provocan minúsculas caídas del brillo de las estrellas que pueden ser detectadas por Los instrumentos. a su vez, el nivel de caída del brillo y la frecuencia con que se repite deja considerar el tamaño de los planetas y la duración de sus años, respectivamente. No obstante, aparte de eso, los exoplanetas se pueden ubicar por medio de la velocidad radial. Básicamente, los astrónomos miden el cabeceo que se provoca en las estrellas En el momento en que uno o Múltiples planetas giran a su alrededor. Ocurre Porque tanto las estrellas Del mismo modo que los planetas se mueven alrededor de un centro de masas, y tiene el beneficio de que A partir de la tierra se puede medir de qué manera se acerca o bien aleja la estrella con relación a nosotros, lo cual concluye permitiendo deducir de qué forma son los exoplanetas de los alrededores. Y es aquí donde el instrumento ESPRESSO ha alcanzado una precisión sin precedentes. «Cuando se descubrió Cercana b, por medio del método de la velocidad radial, se midió su masa con un error próximo al 20%», ha explicado a ABC Enric Pallé, coautor del trabajo y También estudioso en el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC). «Aquí se ha repetido el estudio, con las mismas técnicas, No obstante logrando medir la masa del planeta con un fallo por debajo del 10%». Este crecimiento de la precisión se ha logrado pues ESPRESSO ha mejorado la capacidad de otros instrumentos de medir las velocidades con las que las estrellas se acercan o bien alejan de nosotros a causa de su cabeceo. En verdad, el instrumento ha sido capaz de medir velocidades de 30 centímetros por segundo, en el horario una persona suele caminar a un tanto más de 100 centímetros por 2do. Lo más relevante de este trabajo es precisamente constatar que ESPRESSO tiene esa capacidad, lo cual «permitirá el descubrimiento de muchos planetas pequeños, el refinado de las masas de muchos otros planetas y la investigación de atmósferas de gigantes gaseosos», ha opinado Enric Pallé. ¿Puede haber vida en Cercana b?
Sin embargo, hasta la fecha en que no entren en funcionamiento los cercanos telescopios gigantes, De exactamente la misma forma que el ELT o bien el TMT, o bien el observatorio espacial WFIRST, no se va a poder estudiar la atmósfera de planetas tan pequeños Del mismo modo que Siguiente b. Sin embargo, ¿sería realmente posible descubrir huellas de vida allá? «Es verdaderamente difícil que ningún mundo en torno a un estrella M –una enana roja, más pequeña y menos brillante que el Sol– tenga vida en su superficie», ha explicado Enric Pallé. «Esos planetas teóricamente tienen una temperatura que permite la existencia de agua liquida, Pero A lo largo de enorme una parte de su historia evolutiva han estado sometidos a procesos que tal vez hayan volatilizado cualquier atmósfera que pudiera existir». Fundamentalmente, Durante su juventud las enanas rojas son mucho más brillantes y abrasan a los planetas que están cerca. «Esa actividad estelar implica fulguraciones y muchas emisiones en el ultravioleta y rayos X que Asimismo es mayor en la juventud de la estrella, Sin embargo que se mantiene A lo largo de toda la vida estelar. Lo cual no está pasando en estrellas mas masivas Al afín que el Sol», ha enumerado Pallé. Pero no todo está perdido. Aún hay que comprobar que, efectivamente, los planetas en torno a estas estrellas no albergan atmósferas compatibles con la presencia de vida y es muy posible que se encuentren Ciertas sorpresas. «Efectivamente, Siguiente b recibe (y ha recibido) una dosis de radiación de alta energía muy superior a la de la Tierra», ha comentado Ignasi Ribas. «Desde una visión geocéntrica, esto podría parecer que deja tocada de muerte su posible habitabilidad. No obstante a decir verdad, sabemos tan poco acerca de de qué forma funciona la vida y en qué condiciones se crea y se destruye que es demasiado temprano para hacer afirmaciones categóricas». Lo único que resta es explorar un fascinante vecindario repleto de sistema solares aun en la estrella más siguiente al Sol.