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La tos repetitiva degrada gravemente la eficacia de las mascarillas

Cada vez más investigaciones científicas apuntan a la eficacia de las mascarillas Al idéntico que tratamiento de freno del nuevo coronavirus. Aunque, existen menos estudios acerca de cómo se degradan con el manipulación, A pesar de que mucha gente las reutiliza en varias oportunidades, incluso por arriba de su vida útil. Por ello, un Equipo de la Universidad de Nicosia (Chipre) termina de publicar en «Physics of Fluids» unas conclusiones un poco alarmantes: aun con mascarilla, las gotas de saliva podrían viajar más de un metro de distancia. Talib Dbouk y Dimitris Drikakis, autores de la investigación y expertos en física de fluidos, utilizaron modelos matemáticos para crear posibles rutas del flujo de estas pequeñas gotas Cuando una persona tose repetidamente, con y sin mascarilla. Los resultados exhiben que esta herramienta de contención puede reducir a la mitad la transmisión de partículas en el aire, Ya que sin ellas las gotas pueden llegar hasta los cinco metros de distancia. Pero, la eficacia de filtrado de las máscaras se ve con seriedad afectada por la tos recurrente, un síntoma muy usual del Covid-19. Aun con mascarilla, existe peligro
Los resultados son alarmantes. En las simulaciones por ordenador se puede observar de qué forma el uso de la máscara es efectivo acerca de todo al principio de un ataque de tos: en el primer arranque, la tela es capaz de contener hasta el 91% del transporte de saliva. Aunque, Según se incrementa en el tiempo, cada vez más gotas se escapan de la mascarilla, «viajando incluso más de 1,2 metros de distancia», aseguran los investigadores, quienes para la simulación incluyeron unas condiciones ambientales de velocidad de viento cero, temperatura Entorno de 20 grados C, presión de 1 atmósfera y humedad relativa del 50%; De la misma forma incluyeron la temperatura de la boca a 34 grados C y la de la piel de la hacia es de 32 grados C. Evolución de la tos por segundos, con máscara y sin máscara – Talib Dbouk y Dimitris Drikakis
Pero las simulaciones no se limitaron Sólo a los cinco primeros segundos. En un vídeo elaborado por los investigadores (y que se halla en la cabecera de esta noticia) se puede observar de qué forma las gotas llegan más allá de los 1,6 metros de distancia en un Sólo ataque de tos prolongado de 17 segundos, reafirmando la idea de que Aunque la tela protege bastante de la propagación del virus, no es suficiente en distancias cortas y pierde eficacia Según se utiliza. Gotas grandes contra gotas pequeñas
Los estudiosos Además señalan que Algunas gotas se escapan por los costados de la mascarilla y que el tamaño de las gotas, que varía Según la intensidad de la tos, Además influye en el flujo de gotas, Pero «aún no está claro si es que las gotas grandes o bien pequeñas son más infecciosas», señala Por su comunicado Dbouk. Por ello, los investigadores alertan de que el manipulación de mascarilla «no proporciona una protección completa», por lo que el distanciamiento social «sigue siendo esencial». En verdad, los estudiosos recomiendan para los sanitarios y los trabajadores que están en contacto directo con el virus «un club de protección personal mucho más completo, incluidos cascos con filtros de aire incorporados, protectores faciales, batas desechables y guantes dobles». Por otro lado, los investigadores De la misma forma instan a los fabricantes y las autoridades reguladoras a juzgar nuevos criterios para evaluar el rendimiento de la máscara que tengan en cuenta la física del flujo y la activa de la tos, Así De La misma manera que nuevos estudios acerca de de qué manera las mascarillas se degradan con el manipulación del tiempo.