En la actualidad existen seis continentes emergidos y 15 grandes placas tectónicas, enormes y rígidos pedazos de la corteza del planeta que se deslizan acerca de el manto, una capa inferior, Del mismo modo que buques a la deriva. No obstante en el pasado la Tierra tenía un aspecto muy diferente: sabemos que existió un gran supercontinente, Pangea, y que Ya antes de éste hubo otros. Esto es resultado de la tectónica de placas, un proceso que, empujado por las enormes presiones y temperaturas del interior del mundo, varía la forma de los continentes y que, También, provoca cordilleras, terremotos o erupciones volcánicas. ¿Desde cuándo ocurre esto? ¿Habrá un terminante? Muchos estudiosos llevan años tratando de contestar a estas y otras preguntas. Esta semana, un estudio publicado en la gaceta «Science Advances» ha mostrado pruebas de que la tectónica de placas era global, es decir, que ocurría en toda la superficie del planeta, hace al menos 2.000 millones de años. Estos son los primeros indicios de la tectónica global encontrados hasta en seguida. «Es Del mismo modo que platicar de la invención de internet», ha dicho en un parte Ross Mitchell, coautor del estudio y Asimismo estudioso del Instituto de Geología y Geofísica de la Academia República Popular China de Ciencias (CAS). «Aunque internet existió de alguna forma u otra En medio décadas, no se dirigió hasta 1990 Una vez que arrancó la Era de la Información», ha añadido. Lo mismo Tuvo lugar con la tectónica de placas: hay indicios y modelos sobre cuándo comenzó, Sin embargo no se sabe exactamente en qué momento se hizo global. Huellas de antiguos movimientos Ciertos estudiosos sitúan el origen de la tectónica hace hasta 4.000 millones de años, Sólo 560.000 años Posteriormente de su nacimiento. Por otra comunicado, las pruebas más directas dejan localizarla hace 1.000 millones de años. Ahora, el elenco de investigadores de la corporación República Popular China ha concluido que el proceso era global hace 2.000 millones de años. ¿Cómo lo han averiguado? Sabemos que en el horario las placas tectónicas se mueven y «chocan» En ocasiones levantan cordilleras, Al igual que el Himalaya o los Pirineos. Sin embargo las montañas son resultado de los movimientos más recientes, en la escala geológica, y no permiten saber qué ocurría hace miles de millones de años. En un caso así, los estudiosos diseñaron un estudio sismológico para investigar la estructura de antiguas porciones de la corteza. Para ello acudieron a Varios zonas donde la corteza ha permanecido estable A lo largo de mucho tiempo, De exactamente la misma forma que la región de Ordos, en la provincia de Shaanxi ( República Popular China). Allá, descubrieron huellas sísmicas de la discontinuidad de Mohorovičić, una región de transición entre rocas de distinto composición que marca la frontera entre la corteza y el manto. En concreto, estas señales resultaron indicar antiguos procesos de subducción, un proceso por el cual una placa tectónica se desliza bajo otra. La naturaleza de los materiales les ha permitido completar que había subducción en aquella zona hace miles de millones de años. Y que, en consecuencia, había movimientos tectónicos. Reconstrucción del subsuelo Debido a estudios sismológicos que indican la presencia de un proceso de subducción – IGG
Este tipo de señales se ha encontrado, por poner un ejemplo, en el Himalaya, donde la placa india se «cuela» bajo la euroasiática. Sin embargo la sorpresa es que los investigadores han podido demostrar que este fenómeno Ocurrió en Varios zonas del mundo, hace cerquita de de 2.000 millones de años, lo que apoya la idea de que la tectónica era global por luego. «Los investigadores han hecho un enorme trabajo describiendo sus resultados y situándolos en un Sólo contexto mayor», ha expresado en un comunicado Peter Cawood, estudioso de la Universidad de Monash (Australia) no implicado en el estudio. Según los creadores del estudio, estos procesos de subducción tan antiguos, vinculados a una tectónica de placas global, pueden relacionarse con los movimientos tectónicos que llevaron a la formación de Nuna, posiblemente el 1er supercontinente de la Tierra.