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Kyle Harper: «Cada época tiene la pandemia que se merece»

La historia del ser humano está estrechamente vinculada a las pandemias. En el siglo II d.C., la terrible plaga Antonina, quizá causada por la viruela, mató a siete u ocho millones de personas, afectando profundamente a un imperio romano que estaba en su auge. Paradójicamente, esta epidemia no habría ocurrido si las comunicaciones y las ciudades romanas no se habrían desarrollado tanto. De igual forma, la gripe del 1918 quizá no se habría extendido Tal y como lo hizo, matando a millones de personas, si el mundo no hubiese estado tan devastado por los rigores de la Primera Guerra Mundial. Kyle Harper es cantautor de «El fatal destino de Roma» – Crítica Kyle Harper, maestro de la Universidad de Oklahoma (U.S.A.) y cantautor de «El fatal destino de Roma», está especializado en la historia de las epidemias y las economías. Su trabajo está centrado en entender de qué manera las sociedades moldean el medio Ambiente y de qué forma ésto A su vez tiene consecuencias que repercuten en el destino de exactamente las mismas sociedades. Por eso, afirma que, en cierto sentido, «cada sociedad tiene la pandemia que se merece», en términos ecológicos, No obstante no morales. Piensa que la COVID-19 es una enfermedad que explota las vulnerabilidades del mundo contemporáneo, Al semejante que la enorme interconectividad o la alta densidad de población. De hecho, coincide con los expertos que afirman que el modo de vida vigente, caracterizado por el vasto manipulación de los recursos naturales del planeta, ha inaugurado una inédita era de pandemias globales causadas por patógenos emergentes. -¿Qué puede enseñarnos la historia acerca de el presente o el futuro de las epidemias? La historia puede enseñarnos a comprender de qué forma el impacto humano acerca de el medio Entorno, con sus ciudades, comunicaciones o sistemas de producción, tuvo consecuencias. En otros términos, que cada temporada tiene la pandemia que se merece, en términos ecológicos, no morales. De ahí que, de alguna forma esta pandemia era completamente previsible. No sabíamos cuándo o dónde iba a suceder Sin embargo sabíamos que muchas especies de patógenos están constantemente tratando de atravesar la barrera de las especies y Asimismo infectar a humanos. Muchos científicos predijeron que algo De este modo iba a pasar. -¿En qué sentido cree que cada temporada tiene la pandemia que se merece? Una de las vulnerabilidades que definen a nuestra sociedad es la conectividad global y la gran densidad de población. Por eso, de entre todas las enfermedades infecciosas posibles, las causadas por virus respiratorios son tal vez las que más peligrosas son para nosotros. Sobre todo si los patógenos tienen un alto grado de transmisibilidad, incluso en personas asintomáticas, con un periodo de incubación largo. Por eso, por desgracia el SARS-CoV-2 es prácticamente el patógeno perfecto para las vulnerabilidades de nuestra sociedad. «Por desgracia, el SARS-CoV-2 es casi el patógeno perfecto para las vulnerabilidades de nuestra sociedad» Una estación de ferrocarril en Hangzhou, China, el pasado 30 de septiembre. Según Kyle Harper la densidad de población y la interconectividad son dos vulnerabilidades de las que el SARS-CoV-2 se «ha aprovechado» – EFE -¿Casi? ¿Podría ser peor? Indudablemente. Va a haber otra pandemia en el futuro y podría estar causada por un patógeno más letal. De hecho, los otros coronavirus causantes del SARS o bien del MERS son más letales. Creo que hemos tenido suerte y que podríamos aprovechar esta pandemia para aprender acerca de nuestras vulnerabilidades y de qué manera podemos afrontarlas frente las próximas pandemias. -Entonces, ¿es la letalidad el ingrediente que le falta al SARS-CoV-2 para ser el peor patógeno posible? Muy posiblemente. La gripe de 1918 viajó quizá más severa que la COVID-19. Sin duda, sus tasas de mortalidad acudieron más altas —los cálculos oscilan, No obstante se habla de que causó entre 10 y 50 millones de damnificados mortales en dos años— Aunque yo sería cauteloso. La jornada de hoy en jornada tenemos mejores hospitales, doctores y tratamientos que hace un siglo, con lo cual no Me sorprendería que la COVID-19 fuese más comparable a la gripe de 1918 de lo que solemos pensar. -Usted ha comentado que el impacto del SARS-CoV-2 palidece en comparación con pandemias reconocidas. ¿Debemos agradecérselo a las mejores condiciones sanitarias o bien la propia naturaleza de los patógenos? A ambas cosas. Hay dos diferencias fundamentales entre nuestro mundo y el planeta pasado. La primera es que nuestra sociedad tiene más capacidad para controlar y tratar los brotes de las enfermedades infecciosas y De ahí que la mortalidad de las epidemias es muy inferior. De ahí que, Ya antes las pandemias solían llevarse al 10 o bien al 20% de la población y, en la ocación de la Peste Negra, incluso más, Pero Hoy los antibióticos, los tratamientos y las vacunas las ponen a raya. No obstante hay otra gran diferencia: nuestras sociedades y economías con mucho más vulnerables y frágiles y nuestro planeta está construido acerca de el principio de que podemos controlar las enfermedades infecciosas, de una manera que las sociedades premodernas no lo estaban. De ahí que, Pero no se pueda comparar la mortalidad de la COVID-19 con la de la peste del siglo XIV, su disrupción sí que es paralela en muchos sentidos. La sociedad actual depende de pilares Como el urbanismo, el transporte, el comercio o bien el turismo, que están amenazados en esta pandemia. «Nuestro planeta está construido acerca de el principio de que podemos controlar las enfermedades infecciosas, de una forma que las sociedades premodernas no lo estaban» -¿Cree luego que la pandemia de COVID-19 es la primera pandemia de una época marcada por esta vulnerabilidad? Sí, creo que con el coronavirus hemos entrado en una inédita era de pandemias globales. Muchos epidemiólogos de renombre, incluyendo a Anthony Fauci —jefe de la respuesta ante al coronavirus en el gobierno de Estados Unidos— ha comentado que hemos entrado en la nueva era de las pandemias. Es difícil predecirlo, No obstante muy posiblemente en los próximos 20 o 30 años Veremos un suceso tan disruptivo Tal y como la pandemia de COVID-19. El ébola, en la imagen, es uno de los patógenos emergentes, nuevos agentes infecciosos que se han extendido en las últimas décadas – CDC
En mi opinión se puede comprender la historia De La misma manera que un largo período en el que mejoraron nuestras herramientas para controlar las infecciones. Sin embargo, en las últimas décadas Además ha reforzando la aviso que suponen las enfermedades infecciosas, a causa del uso humano del medio Ambiente, el urbanismo o la globalización. «Creo que con el coronavirus hemos entrado en una inédita era de pandemias globales» Y ya había habido señales de amenaza de que esto iba a pasar. En los últimos 20 o 30 años hemos visto de qué manera aparecían muchas nuevas enfermedades infecciosas, De esta forma tal y como el ébola, el virus Nipah, el SARS, el virus del Nilo, etc. ¡Todo esto no ha ocurrido por el hecho de que sí! -A pesar del SARS-CoV-2, la gripe permanece siendo el patógeno más temido… Sí, se prosigue pensando que la gripe es la mayor advertencia y el causante del cercano acontecimiento disruptivo. Y De esta manera se puede pensar, al estudiar los patrones por los cuales emerge y evoluciona. Por eso la COVID-19 es tal vez una denominada de atención acerca de el hecho de que las enfermedades infecciosas realmente ponen a prueba los mecanismos de control que tenemos. Espero que ésto se convierta en una experiencia que aprovechemos para aprender a invertir en el crecimiento de vacunas más amplias, nuevos tratamientos e instituciones globales. «La COVID-19 es quizá una llamada de atención acerca de el hecho de que las enfermedades infecciosas en realidad ponen a prueba los mecanismos de control que tenemos» -La ciencia continua avanzando, No obstante, ¿cuán probable es que el mundo desarrolle nuevas herramientas políticas para lidiar con esta clase de pandemias? Soy levemente optimista, Aunque después el panorama político está hecho un desastre, sobre todo en EEUU. Creo que las cosas no van a mejorar en uno o un par de años Pero que, En el momento en que pase lo peor de la pandemia, habrá un reconocimiento profundo de que nos enfrentamos a inconvenientes globales que requieren una cooperación global. La Organización Mundial de la Salud (OMS) tiene sus límites y incidentes, Pero creo que va a ser el auto a largo plazo para alcanzar una cooperación mayor. Si volvemos al siglo XIX, vemos que Ocurrió algo semejante. Había una terrible epidemia de cólera y no había buena cooperación entre las naciones. Gran Bretaña, por entonces el país más poderoso, se hizo a un lado, En tanto otros desarrollaban instituciones de salud global. Pero al final la enfermedad reemplazó la percepción de la gente y permitió que ocurriera Asimismo allá. La comunidad científica tiene una visión tan global, y los incentivos son tan fuertes, que se acabará superando la polarización y las diferencias geopolíticas. Cartel de 1832 haciendo recomendaciones erróneas acerca de el cólera, donde se solicita no beber agua fría. Varias epidemias de cólera provocaron muertes y agitación social especialmente en el siglo XIX -¿Qué es lo que más le ha sorprendido de esta pandemia? Así como historiador, está siendo fascinante vivirla. Me ha impactado mucho lo que ha ocurrido con la psicología colectiva: la manera De este modo tal y como ha generado miedo y división, exacerbando enfrentamientos previos. Ver de qué forma reacciona la sociedad frente a un evento tan grande, complejo, dramático y aterrador hace ver la historia de otra manera. «Como historiador, está siendo fascinante vivir esta pandemia. Me ha impactado mucho lo que ha ocurrido con la psicología colectiva» -¿Ha sucedido algo igual Ya antes? Indudablemente. Al mirar atrás, en la peste del siglo XIV o bien en las epidemias de cólera del siglo XIX, se puede encontrar exactamente el mismo patrón de división, culpa, miedo y confusión. Provocaron grandes choques de clases, la gente pobre culpó a la gente rica, y surgió la desconfianza en la medicina. Sin duda todo esto es comunicado de un patrón más profundo que no se comprende del todo. -¿Estas epidemias y la vigente, cambian el rumbo de la historia o la precipitan? Es difícil predecirlo. Escribí sobre ello Ya antes de que estallasen todos y cada uno de los conflictos raciales que han aparecido en Estados Unidos. América ha tenido tensiones raciales mucho Ya antes de la pandemia, y la brutalidad policial estaba en los focos A partir de hace tiempo. No obstante creo que Pero el homicidio de George Floyd no estuvo de manera directa conectado con la pandemia, sí que guarda relación con la ocasión médica y de salud. El coronavirus ha acelerado o bien intensificado las reacciones frente la injusticia. Una vez que los historiadores miren cara atrás, dentro de 20 años, verán ambas cosas De exactamente la misma forma que fenómenos relacionados. No sé qué ocurrirá mañana, Pero la pandemia ha acelerado la agitación política. «El coronavirus ha acelerado o bien intensificado las reacciones ante la injusticia» Múltiples personas identificadas con el movimiento Black Lives Matter protestan en la Jefferson Square Park, en Louisville, Kentucky (USA), este miércoles – AFP -¿Quizás un ingrediente fuerte es la pérdida de confianza en las instituciones o el sistema? Es cierto. Muy posiblemente la confianza en el capital social tiene un papel muy particular. Reino Unido y U.S.A. tienen el mejor sistema científico del mundo, y Pero su respuesta ha sido un desastre. En otros países, con mayor confianza en el capital social, De exactamente la misma manera que Nueva Zelanda, Corea del Sur o bien Taiwán, las respuestas han sido muy cohesionadas y eficaces. -¿Volverá el mundo a ser Del mismo modo que Ya antes de la pandemia? Eso no va a acontecer. Creo que aprenderemos a aceptar que jamás tendremos un control total de las enfermedades infecciosas y que tendremos que convivir con ello. -Esta pandemia ataca los pilares de nuestra economía: el turismo, el comercio, la interconectividad. ¿Cómo continuar A partir de ahora? Es una de las grandes preguntas. Creo que nos adaptaremos, Si es que bien nada será afín. Y Si bien tengamos una vacuna, esto no va a haber acabado. Habrá que vivir con mascarilllas y tendremos que adaptar nuestros grandes y pequeños hábitos. En algunos sentidos va a ser De esta forma como el impacto que tuvo el 11-S. Será más desagradable y difícil, Sin embargo nos acostumbraremos y encontraremos maneras de abrir el planeta, de mitigar los riesgos. Volverá a haber conciertos, Pero tendremos que emplear mascarilla. «En ciertos sentidos el impacto del coronavirus va a ser De exactamente la misma forma que el impacto que tuvo el 11-S» -¿Es la pandemia de COVID-19 la 1era pandemia relacionada con eso que Ian Paulsen y Michael Gillings definen Del mismo modo que la microbiología del Antropoceno? (Harper escribe sobre ello acá y acá). Sí. El Antropoceno, la dominación humana del planeta, con nuestro manipulación de recursos y energía, nuestra capacidad de alterar los ecosistemas naturales, tienen consecuencias. No Sólo alteramos el clima, Además influimos en la evolución de casi todos y cada uno de los organismos y, Asimismo, estamos comandando la evolución de los patógenos humanos. De ahí que una de las secuelas es activar la aparición de patógenos humanos. De hecho, en los últimos 30 años se han detectado más enfermedades infecciosas nuevas que en ningún otro periodo precedente. Esta pandemia vigente es un incidente del Antropoceno. «El Antropoceno implica que estamos activando la aparición de patógenos humanos» El teatro romano de Mérida
-Los romanos sufrieron una pandemia terrible en el siglo II d.C.. ¿Cómo les afectó, Al idéntico que sociedad? No sabemos suficiente Del mismo modo que para contestar a esa pregunta. La pandemia viajó causada posiblemente por la viruela y sabemos que les afectó significativamente —murieron entre cinco y ocho millones de personas—, Pero que acudieron capaces de capear el temporal. El imperio sobrevivió y se recuperó. -¿Hay algún paralelismo entre aquello y el caso actual? Creo que no. Podemos aprender de la historia para entender el papel del impacto humano en los ecosistemas naturales y de qué forma eso repercute en el destino de las sociedades humanas. No obstante nuestro mundo es tan diferente que evitaría hacer paralelismos. -Se comenta que la Peste Negra aceleró la llegada del Renacimiento. ¿Las pandemias tienen efectos positivos? Sí, No obstante la realidad es muy compleja. Este año, unos investigadores publicaron un artículo que dejaban claro que el impacto de la Peste Negra en España se dirigió terrible. Causó una caída demográfica cuyas consecuencias se alargaron dos siglos y que tuvieron consecuencias económicas atroces. En otros lugares, hubo problemas en el corto plazo, muchas muertes, sin ir más lejos, y beneficios a largo plazo. Pero Por lo general, fue un desastre. «El impacto de la Peste Negra en España fue terrible. Causó una caída demográfica cuyas consecuencias se alargaron dos siglos» -Ha comentado que los hospitales, los tratamientos o las vacunas evitan que las pandemias sean tan mortales También que en el pasado. ¿Puede el negacionismo, el rechazo a la ciencia y las vacunas, invertir las tornas? Creo que, de nuevo, volvemos al problema de la confianza. El movimiento antivacunas es minoritario, No obstante es suficiente para causar problemas, por el hecho de que éstas dependen de inmunizar a la población. Por eso, creo que el negacionismo es un problema muy serio. Tal vez una de las lecciones de esta pandemia es de qué forma está entrelazada con incidentes psicológicos y de comportamiento. La solución a la COVID-19 no será Solo técnica, Sino dependerá de que haya muy buena comunicación acerca de qué es o de qué forma funciona una vacuna. Estamos en una época en la que la comunicación científica es sumamente esencial.