Ir al contenido

El posible motivo por el que no vemos nuestras llaves Si bien las tengamos delante

¿Alguna vez ha abierto la nevera en búsqueda de la mayonesa y no la ha visto Si es que bien la tuviera delante? ¿Ha buscado las llaves de casa Durante un buen rato, Aunque las tuviera en la mano o justo delante de sus narices? Según un artículo que se ha publicado recientemente en «Nature», el motivo puede estar en las «ondas cerebrales viajeras». Tal Del mismo modo que han concluido estudiosos del Colegio Salk, en La Jolla, EEUU, estas señales nerviosas forman una parte del sistema visual y están organizadas para permitirle al cerebro recibir, o no recibir, objetos difíciles de ver. «Hemos descubierto que los objetos tenues son mucho más fáciles de ver si la visualización está sincronizada con las ondas cerebrales viajeras», ha resumido para «Cosmosmagazine.com» John Reynolds, cantautor senior del artículo. Mayor o bien menor sensibilidad
«Estas ondas facilitan la sensibilidad de la percepción, de forma que hay instantes en que puedes ver lo cual de otro modo no verías», ha expresado Reynolds. Si bien, Además ocurre al revés. Hasta ahora, se había estudiado estas ondas En medio la anestesia, No obstante se había concluido que quizás eran un artefacto de las mediciones. Si es que bien, el Plantel de Reynolds se propuso investigar si estas ondas se producían Además A lo largo de la vigilia. Para ello, desarrollaron Varios técnicas computacionales, junto a estudiosos de la Universidad occidental de Canadá, para monitorizar la actividad de las neuronas en la corteza visual en tiempo real. Las ondas que deciden de qué manera vemos
De esta manera, pudieron seguir la actividad de unas neuronas que constituyen parte de una región cerebral en la que se forma un mapa completo del mundo visual. Lo hicieron en busca de las ondas cerebrales viajeras que tienen sector En medio actividades visuales. Esta labor visual consistió en ver una imagen sutil proyectada en una pantalla que las personas Sólo pudieran detectar el 50% del tiempo, y en registrar la actividad neuronal en el instante en que se detectaba. De este modo, observaron que dicha imagen se detectaba, o no, a causa de la actividad cerebral relacionada con estas ondas viajeras: si es que estaban alineadas con el estímulo, el observador podía advertir el objeto más De manera fácil. «Hay un nivel espontáneo de actividad en el cerebro que semeja estar regulado por estas ondas viajeras», ha dicho Terrence Sejnowski, coautor del estudio. «Creemos que estas ondas son producto de la actividad que se propaga por el cerebro, y que está liderada por la activación de neuronas locales». Acto seguido, los estudiosos tratarán de examinar si estas ondas están coordinadas en distintas zonas cerebrales implicadas en la visión. Piensan que esto podría explicar la relación entre el procesamiento sensorial (ver las llaves) y la percepción consciente (percibir las llaves) que emerge del cerebro en su conjunto.