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El problema de Guthrie: el secreto detrás de utilizar Solo cuatro colores en los mapas

El uso del color en la cartografía, De la misma forma de ser un convencionalismo gráfico, es un recurso estético. Por una comunicado, el simbolismo cromático ha servido para establecer relaciones entre zonas y elementos naturales y, por otra, para diferenciar fronteras entre estados. Hasta la Edad Media los cartógrafos empleaban una simbología bíblica que ligaba la prenda sacerdotal con los elementos de la naturaleza. De este modo, usaban el blanco para la tierra, el azul para el medio aéreo, el púrpura para el agua y el rojo para el fuego. La cartografía histórica renacentista se sirvió de tan Sólo cuatro colores para sombrear todo el mapa del Antiguo Continente, sin que dos países limítrofes tuvieran exactamente el mismo color. Una aplicación práctica que no tenía su correspondencia teórica y que trajo de cabeza a los matemáticos más brillantes Durante una centuria. Todo comenzó en 1852 en el horario el abogado y botánico sudafricano Francis Guthrie se ha colocado a colorear un mapa de Inglaterra dividido en condados. Observó que era capaz de sombrear el mapa de manera tetracromática -no necesitaba más- y conjeturó que debería acontecer lo mismo con cualquier otro mapa geopolítico. Francis se lo comentó a su hermano Frederick y este Por su comunicado al prestigioso matemático Augustus de Morgan (1806-1871). Se dirigió precisamente este último el que reformuló el problema, con un enunciado sencillo y de una apariencia inofensiva No obstante que, Por su comunicado, encerraba muchas sutilezas: «Dado un mapa cualquiera del plano bastan cuatro colores para colorearlo, de manera que cada país tenga un Solo color y que países vecinos lleven colores distintos». En su Resolución se imponen Ciertas condiciones, por ejemplo, los mapas son Siempre y en toda circunstancia y en toda circunstancia conexos –de una pieza- y cada una de sus zonas También son conexas, por otra parte, dos territorios diversos no pueden tocarse en un Sólo punto, para ser colindantes se requiere que compartan una frontera mayor. La solución llegó del otro lado del Atlántico
De Morgan era toda una autoridad en el sector de las matemáticas, se dirigió el 1er presidente de la Sociedad de Matemáticas de Londres y intérprete y escritor de las leyes fundamentales de álgebra de la lógica que llevan su nombre. A priori parecía una persona sobradamente autorizada para solucionar el «problema de Guthrie», Aunque, viajó incapaz de hacerlo. Lo ha puesto en conocimiento de otros colegas matemáticos ingleses, quienes Asimismo fracasaron en la empresa. Una década a continuación el problema cruzó el océano Atlántico y Varios matemáticos estadounidenses se consagraron en cuerpo y alma a su Decisión, con resultados semejante de insatisfactorios. Fue luego en el instante el problema de los cuatro colores adquirió la entidad de conjetura. Sabemos que aun Lewis Carroll se alcanzó a interesar por el tema y desarrolló un juego para dos personas en la que cada Deportista diseñaba un mapa y el otro tenía que colorearlo ajustándose al problema de los cuatro colores. La solución llegó en 1966, en el instante cuatro integrantes de el colegio de Matemáticas del Colegio Tecnológico de Georgia –Neil Robertson, Daniel Sanders, Paul Seymour y Robin Thomas- resolvieron matemáticamente el problema planteado por Guthrie en el siglo diecinueve. M.Jara Pedro Gargantilla es médico internista del Sanatorio de El Escorial (La capital de España) y autor de Múltiples libros de divulgación.