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La NASA publica las capturas de la sonda Osiris-Rex recogiendo muestras en el asteroide Bennu

La agencia espacial estadounidense difundió anoche las primeras capturas, en un vídeo de apenas diez segundos y en Varios fotografías, del acercamiento veinticuatro horas Antes de la sonda Osiris-Rex al satélite Bennu, situado actualmente a 320 millones de kilómetros de la Tierra y que viaja a una velocidad de más de 100.000 kms por hora. El vídeo muestra los últimos instantes del acercamiento del brazo robótico de la sonda -articulado y de más de tres mts de longitud- a parte superficial pedregosa del asteroide, y la nube de partículas y pequeñas piedras que salen despedidas al impactar contra la superficie un chorro de nitrógeno a alta presión. De esa polvareda de resíduos, la NASA espera que la Osiris-Rex haya podido recolectar un mínimo de 60 gramos de muestras de menos de dos centímetros de diámetro. Si es que la recogida de muestras no resultase satisfactoria, la sonda podría elaborar un nuevo intento en enero cercano, para emprender en marzo un viaje de regreso a la Tierra que durará un par de años. La Osiris-Rex, del tamaño de un microbús, ha realizado una lenta y cuidadosa aproximación al asteroide Bennu, una enorme roca oblonga de la talla de un rascacielos. La recogida de muestras la ha llevado a cabo en una región preseleccionada de parte superficial, de apenas unos centímetros de diámetro, con una total precisión dada la distancia de nuestro mundo a la que se mueve su objetivo. En la selección ha participado el colegio de Astrofísica de Canarias.<iframe width=”560″ height=”315″ src=”https://www.youtube.com/embed/LJBv4reH9IU” frameborder=”0″ allow=”accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture” allowfullscreen></iframe> El Bennu es un asteroide cuya antigüedad se supone idéntico a la del propio Sistema Solar -más de 4.500 millones de años-, con lo que aportaría información interesantes sobre el Sol y su corte de planetas, que podrían haberse formado por agregación merced a repetidas colisiones de asteroides de diversos tamaños. El Bennu está considerado por la NASA Al similar que «potencialmente peligroso» para la Tierra, Puesto que su órbita le hará aproximarse a nuestro mundo a finales del siglo XXI.