El año pasado, los astrónomos descubrieron un raro mundo a 260 años luz de la Tierra. Llamado LTT 9779b, tiene un tamaño semejante al de Neptuno Sin embargo, al contrario que en nuestro vecino, allí hace tanto calor que sobre su superficie líquida se derritiría el plomo, el platino, el cromo y hasta el acero inoxidable. En verdad, está tan cerca de su estrella que tarda menos de 24 horas en rodearla, por lo cual los científicos pensaron que cualquier esperanza de descubrir una atmosfera sería vana. Pero se equivocaban: la tiene y, a su vez, es tan rara Tal como el resto de este extraño planeta que, Según nuestras teorías, no tendría que existir. La investigación, que concluye de publicarse en «Astrophysical Journal Letters», está dirigida por Ian Crossfield, maestro de física y astronomía en la Universidad de Kansas, y los información han sido logrados Gracias a los telescopios espaciales TESS y Spitzer, de la NASA. Es la primera vez que se observa la atmósfera de un tipo de planeta Así, dentro de la inusual categoría de «Neptunos calientes». Desiertos espaciales con mundos improbables
Normalmente es fácil hallar planetas gaseosos y enormes orbitando alrededor sus estrellas, los llamados «Júpiter calientes»; Pero es mucho más complicado encontrar en esta órbita mundos del tamaño de Neptuno y que De la misma forma conserven su atmosfera. Es por ello que los astrónomos han llamado a esa zona «desierto neptuniano», Puesto que se estima una baja probabilidad a fin de que en ese sitio haya planetas gaseosos del tamaño de Neptuno. «Creíamos que los Neptunos calientes no son lo suficientemente masivos para evitar la evaporación atmosférica sustancial y la pérdida de masa. Es por ello que La mayor una parte de los exoplanetas calientes cercanos a la estrella son Así tal y como Júpiter, enormes planetas gaseosos calientes, o bien planetas rocosos que hace mucho tiempo perdieron a mayoría de sus atmósferas», explica Crossfield. No obstante LTT 9779b es uno de los ejemplos que desafían el conocimiento y la comprensión humanas, por lo que se ha convertido en un excelente objeto de estudio. Una superficie fundida a 1.600 grados «Por 1era vez, medimos la luz que nos llega de este mundo que no tendría que existir», afirma Crossfield en un parte. «Este planeta está tan intensamente irradiado por su estrella que su temperatura supera los 3.000 grados Fahrenheit (1.600 grados celsius) y su atmósfera tendría que haberse evaporado por completo. Aunque, nuestras observaciones nos muestran Durante la luz infrarroja que emite el planeta que sí la tiene». De este modo, se fijaron en cuánta luz infrarroja emitía el planeta Tras girar 360 grados sobre su eje -es decir, un día de aquel Neptuno caliente-. «La luz infrarroja indica la temperatura y dónde están las partes más calientes o frías del planeta. Por ejemplo, en la Tierra, no hace más calor al mediodía, Sino que un par de horas ahora de la tarde. Sin embargo en este planeta en realidad hace más calor casi al mediodía», explica Crossfield. Mucho más frío de lo pensado
Es En este sentido De La misma manera que comprobaron que LTT 9779b es un mundo mucho más frío de lo cual se pensaba y que posiblemente algún sistema de nubes esté reflejando enorme comunicado de la luz que le llega de su estrella. «El mundo tampoco irradia mucho calor hacia su lado nocturno, con lo que creemos que la luz quizás se absorba en lo alto de la atmósfera, A partir de donde la energía se irradia velozmente de vuelta al espacio», asevera Por su parte Nicolas Cowan, del Colegio de Investigación de Exoplanetas (iREx) y de la McGill University en Montreal, quien ayudó en el análisis e interpretación de los datos. O BIEN sea, que enorme comunicado de los rayos de su estrella «rebotan» en contra de su atmosfera, impidiendo que el planeta haya acabado completamente devastado por la radiación. <iframe height=”286″ src=”https://www.youtube.com/embed/x50ShWgCurQ” frameborder=”0″ allowfullscreen style=”width:100%;”></iframe> Pero LTT 9779b no es a priori un lugar en el que alguna manera de vida pueda sobrevivir, sí que puede dar pistas no Solo de la formación de los planetas, Sino más bien más bien de otros mundos que sí puedan hospedar organismos biológicos. «Planetas De la misma forma que el LTT 9779b pueden servir de banco de pruebas para ratificar lo cual sabemos y que lo estamos haciendo bien». Resultados preliminares
Según Crossfield, los resultados son Sólo un primer paso cara una nueva fase de exploración exoplanetaria de atmósferas: «Lo que nuestras mediciones nos muestran son lo que llamamos peculiaridades de absorción espectral: su espectro apunta que hay monóxido de carbono o bien dióxido de carbono en la atmósfera. Solo estamos empezando a comprender qué moléculas componen su atmósfera, Si es que bien Asimismo su temperatura nos está dando pistas acerca de cómo los vientos están haciendo circular energía y material A lo largo de ella». a su vez, el astrónomo asegurao que queda mucho trabajo por hacer para entender mejor el LTT 9779b y Neptunos calientes similares, acerca de todo los que todavía no han sido descubiertos: «Queremos permanecer observándolo con otros telescopios para poder responder más preguntas, De exactamente la misma manera que por ejemplo ¿cómo es capaz este planeta de retener su atmosfera? ¿cómo se formó originalmente? ¿era inicialmente más grande Pero ha perdido una parte de su atmósfera primigenia? Si es que es De esta forma, luego ¿por qué su atmósfera no es Sólo una versión reducida de la atmósferas de exoplanetas más grandes y ultracalientes? o ¿qué más podría haber en su atmosfera?». Cuestiones que en poco tiempo posiblemente puedan disponer una contestación.
