Un club internacional de astrónomos, entre ellos algunos de la NASA y el Instituto SETI para la búsqueda de vida fuera de nuestro planeta, ha calculado con información del telescopio espacial Kepler el número de planetas potencialmente habitables que puede haber Solo en nuestra galaxia, la Vía Láctea. Por el hecho de que bien, el número que han concluido es sorprendente: hasta 300 millones. Ciertos aun podrían estar bastante cerca, incluso a menos de 30 años luz de nuestro Sol. Los hallazgos se publicarán en «The Astronomical Journal». «Esta es la primera vez que todas y cada una las piezas se han reunido para proporcionar una medida confiable del número de planetas potencialmente habitables en la galaxia», asevera Jeff Coughlin, estudioso de exoplanetas en el Instituto SETI y directivo de Oficina de Ciencias de Kepler. «Este es un término clave de la Ecuación de Drake, que se utiliza para considerar el número de civilizaciones (extraterrestres); estamos un paso más cerca en el largo sendero para localizar si es que estamos solos en el cosmos». La Ecuación de Drake es un argumento probabilístico que detalla los factores a considerar al juzgar el número potencial de civilizaciones tecnológicamente avanzadas en la galaxia que podrían detectarse. Esta fórmula Además se considera a menudo Del mismo modo que una hoja de ruta para la astrobiología y guía gran comunicado de la investigación en la escuela SETI. Es la siguiente: en la que N es el número de civilizaciones tecnológicamente avanzadas; R, el número total de estrellas en la vía láctea; fp, la fracción de esas estrellas que tienen sistemas planetarios; ne, el número de planetas apropiados para la vida por cada sistema planetario; fl, la fracción de esos planetas donde se desarrolla vida; fi, la fracción de esos planetas donde se desarrolla la inteligencia; fc, la fracción de esos planetas capaces de comunicarse A través de señales de radio y L, la fracción de tiempo de vida del mundo En medio la cual vive la civilización. Agua líquida
Para desarrollar una estimación razonable, los estudiosos observaron exoplanetas de tamaño igual a la Tierra y que, por lo tanto, es más probable que sean planetas rocosos. Además se fijaron en las llamadas estrellas similares al Sol, de más o bien menos La misma edad y exactamente la misma temperatura. Otra consideración para la habitabilidad es si es que el planeta podría disponer las condiciones necesarias para agarrar agua líquida. Las estimaciones anteriores sobre la determinación del número de exoplanetas potencialmente habitables que hay en nuestra galaxia se basaron en gran medida en la distancia del planeta a su estrella. Esta nueva investigación Además considera cuánta luz llega al mundo Desde su estrella, lo cual afectaría la probabilidad de que el planeta pueda contener agua líquida. Para hacer esto, el Plantel analizó no Solo los datos de Kepler, Sino que Asimismo los data de la misión Gaia de la Agencia Espacial Europea (ESA) sobre cuánta energía emite la estrella del planeta. Al poseer en cuenta los información de Kepler y Gaia, los resultados reflejan mejor la diversidad de estrellas, sistemas solares y exoplanetas en nuestra galaxia. «Saber cuán comunes son los distintos géneros de planetas es extremadamente valioso para el diseño de las futuras misiones de búsqueda de exoplanetas», afirma Michelle Kunimoto, coautora del estudio e investigadora del Colegio de Tecnología de Massachusetts en Cambridge (EE.UU.). «Las encuestas dirigidas a planetas pequeños y potencialmente habitables alrededor de estrellas similares al Sol dependerán de resultados Del mismo modo que estos para maximizar sus posibilidades de éxito», añade. Los estudiosos Piensan que se necesitarán más investigaciones para entender el papel que tiene la atmósfera de un planeta en su capacidad para soportar agua líquida. La misión Kepler, que abandonó de recopilar data oficialmente en 2018, ha identificado más de 2.800 exoplanetas confirmados, con Varios miles de candidatos más. Hasta a continuación, los astrónomos han identificado Múltiples cientos de planetas en la región habitable de su estrella en los datos de Kepler. Del mismo modo que dicen los autores: «¡Puede llevar un tiempo ubicar los 300 millones!».
