La comunidad científica acepta De exactamente la misma forma que cierto que hace unos 66 millones de años un asteroide embistió en la punta de la península de Yucatán, en el México actual, causando un invierno global que duró Múltiples años y acabó con el 75% de las especies sobre la Tierra, incluyendo los dinosaurios. Si es que bien, no ha estado tan claro cuál viajó el mecanismo exacto que arrasó con la vida. ¿Fue el frío insoportable? ¿La oscuridad en la que se sumió el planeta? Ahora, un nuevo estudio en la revista «Geophysical Research Letters» cree tener la respuesta. El flamante estudio simula las contribuciones de las emisiones de azufre, polvo y hollín del impacto a la oscuridad y el frío extremos de lo cual lleva por nombre un invierno de impacto. Y los resultados no permiten sitio a dudas: el frío habría sido severo No obstante probablemente no lo suficientemente devastador De este modo tal y como para provocar una extinción masiva. Si bien, las emisiones de hollín de los incendios forestales mundiales oscurecieron el cielo lo suficiente Como para matar los vegetales en la base de la red alimentaria A lo largo de más de un año. Ahí está la clave. El impacto del asteroide de Chicxulub arrojó material a la atmósfera superior que acto seguido llovió de retorno a la Tierra. Las partículas de retorno tenían suficiente energía para asar, literalmente, parte superficial terrestre y desatar incendios forestales globales. El hollín de los incendios, junto con los compuestos de azufre y el polvo, bloquearon la luz solar y causaron un invierno que duró Múltiples años. Investigaciones anteriores estiman que las temperaturas globales promedio cayeron en al menos 26ºC. Los científicos saben que la extrema oscuridad y el frío fueron devastadores para la vida, No obstante aún están apartando qué componente fuen el más dañino. En el nuevo estudio, los investigadores utilizaron un modelo climático sofisticado para simular los efectos climáticos del hollín, los sulfatos y el polvo del impacto. Sus resultados sugieren que las emisiones de hollín de los incendios mundiales absorbieron la mayor volumen de luz solar A lo largo del mayor tiempo posible. Hasta el punto de que los niveles de fotosíntesis cayeron por debajo del 1% de lo normal Durante más de un año. «En comparación con el polvo, que no permaneció en la atmosfera tanto tiempo, y el azufre, que no bloqueó tanta luz, el hollín podría impedir que casi toda la luz llegue a la superficie Durante al menos un año», afirma Clay Tabor, geocientífico de la Universidad de Connecticut y cantautor principal del nuevo estudio. «Parece que estas condiciones de poca luz son una explicación probable para gran comunicado de la extinción», añade. Refugio en el Ártico
La oscuridad habría sido devastadora para la fotosíntesis y podría explicar la extinción masiva por medio de un colapso de la red alimentaria, Conforme los investigadores. Toda la vida en la Tierra depende de fotosintetizadores También que plantas y algas que cosechan energía de la luz solar. Curiosamente, la caída de temperatura quizás no viajó tan perturbadora para la vida Del mismo modo que la oscuridad. En zonas Tal como las altas latitudes, los resultados sugieren que los océanos no se enfriaron significativamente más de lo cual lo hacen A lo largo de un ciclo normal de las estaciones. «En comparación con los casi un par de años sin actividad fotosintética del hollín, semeja disponer una importancia secundaria», afirma Tabor. Al idéntico que resultado, las zonas costeras de latitudes altas pueden haber sido refugios para la vida en los meses posteriores al impacto. Conforme los estudiosos, las plantas y los animales que viven en el Ártico o en la Antártida ya están acostumbrados a grandes cambios de temperatura, frío extremo y poca luz, con lo que podrían haber tenido una mejor ocasión de sobrevivir al impacto del invierno. Los resultados Además proporciona data sobre lo cual podría acontecer en un Solo escenario de invierno nuclear. «El principal impulsor es realmente el hollín en una situación de tipo similar», indica Tabor. «Lo que en realidad Destaca es cuán potencialmente impactante puede ser el hollín en el sistema climático».