Por primera vez, un Equipo de astrónomos ha observado el corazón intacto de un planeta. Versa del núcleo sobreviviente de un gigante gaseoso que orbita una estrella distante a 730 años luz de distancia. Quizás, quedó expuesto al ser despojado de su atmósfera gaseosa o no pudo formar una en sus primeros años de vida. El hallazgo, dado a conocer en la gaceta «Nature», ofrece una visión sin precedentes del interior de un planeta extrasolar. El núcleo, llamado TOI 849 b, es del mismo tamaño que Neptuno en nuestro propio sistema solar. Orbita tan alrededor su estrella anfitriona -muy parecida a nuestro Sol-, que un año dura Solo 18 horas y su temperatura superficial es infernal, de cerca de de 1.500 ºC. TOI 849 b viajó encontrado por el satélite TESS de la NASA, dedicado a buscar nuevos mundos en tránsito, expresado de otro modo, en el horario pasan por delante de sus estrellas anfitrionas y mitigan su brillo. Resultó toda una novedad, Porque apareció en lo que los astrónomos llaman el «desierto de Neptuno», una zona siguiente a las estrellas donde rara vez vemos planetas de la masa de Neptuno o bien más grandes. Entonces, el objeto se dirigió analizado utilizando el instrumento HARPS, en un Sólo programa dirigido por la Universidad de Warwick, en el Observatorio La Silla del Observatorio Europeo Austral (ESO) en Chile. HARPS utiliza el efecto Doppler para medir la masa de los exoplanetas midiendo su «bamboleo»: pequeños movimientos que se registran Como pequeños cambios en el espectro de luz de la estrella. Masivo para su tamaño
El Plantel determinó que la masa del objeto es dos o tres veces mayor que Neptuno, No obstante De la misma forma es increíblemente densa, con todo el material que conforma esa masa aplastada en un Sólo objeto del mismo tamaño que ese mundo de nuestro sistema solar. «Si bien este es un mundo inusualmente masivo, está muy lejos de lo más masivo que conocemos. Pero es lo más masivo que conocemos para su tamaño, y extremadamente denso para algo del tamaño de Neptuno, lo que nos afirma que este mundo tiene una historia muy inusual», dice David Armstrong, del Departamento de Física en Warwick y músico y escritor principal del estudio. «El hecho de que esté en un sitio extraño para su masa Además ayuda: no vemos planetas con esta masa en estos cortos períodos orbitales», añade. TOI 849 b es el mundo terrestre, que tiene una densidad afín a la Tierra, más masivo descubierto. «Esperaríamos que un planeta tan masivo hubiese acumulado grandes cantidades de hidrógeno y helio en el horario se formó, convirtiéndose en algo igual a Júpiter. El hecho de que no veamos esos gases nos deja saber que este es un núcleo planetario expuesto», explica el científico. Y subraya: «Esta es la 1era vez que descubrimos un núcleo expuesto intacto de un gigante gaseoso alrededor de una estrella». Gigante fallido
Pero, ¿qué le avanzó a este planeta? ¿Por qué su núcleo rocoso quedó expuesto? Los estudiosos tienen dos teorías. La primera es que alguna vez se dirigió igual a Júpiter, Sin embargo perdió prácticamente todo su gas externo por alguna razón, Del mismo modo que orbitar demasiado alrededor su estrella o aun Después de una colisión con otro mundo. La fotoevaporación de la atmósfera a enorme escala Además podría desempeñar un papel, Pero no puede explicar todo el gas que se ha perdido. La 2da hipótesis apunta a que sea un gigante de gas «fallido». En otros términos, que Cuando se formó el núcleo del gigante gaseoso, algo podría haber salido mal y nunca se formó una atmosfera. Esto podría haber sucedido si hubiera una brecha en el disco de polvo del que se formó el planeta, o bien si se formó tarde y el disco se quedó sin material. «De una forma u otra, TOI 849 b se dirigió un gigante gaseoso o es un gigante gaseoso ‘fallido’», termina Armstrong. «Aunque Todavía no tenemos data acerca de su composición química, podemos seguirla con otros telescopios. Debido a que TOI 849 b está tan alrededor la estrella, cualquier atmosfera restante cerca de del mundo debe reponerse constantemente A partir del núcleo», señala el investigador. Si pudieran medir la atmosfera, podrían hacerse una idea de la composición del propio núcleo. TOI 849 b puede tener mucho que enseñarnos, incluso sobre la formación de mundos más cercanos, De este modo tal como Júpiter. Al idéntico que se acuerda el cantautor, «tenemos la oportunidad de mirar el núcleo de un planeta de una forma que no podemos hacer en nuestro propio sistema solar. Todavía hay grandes preguntas abiertas».