Los escribas del antiguo Egipto utilizaban tinta negra y roja para escribir los famosos papiros. Con la 1era se hacía el cuerpo principal del publicación, al tiempo que para mencionar los títulos, instrucciones o palabras clave recurrían a la segunda. Durante la última década, muchos estudios científicos han intentado arrojar luz sobre la composición de esas tintas de los años 100 a 200 d.C. para conocer mejor las prácticas de escritura de la temporada. Ahora, un club europeo formado por químicos, físicos y egiptólogos, con la ayuda de técnicas de sincrotrón, ha contado algunos de sus secretos. El más sorprendente es el uso de plomo para secar la tinta, una técnica muy igual a la que emplearon los pintores europeos del siglo XV A lo largo de el crecimiento de las pinturas al óleo. Los estudiosos de la Universidad de Copenhague utilizaron el Laboratorio Europeo de Radiación Sincrotrón (ESRF) en Grenoble (Francia) para estudiar la tinta roja y negra en papiros de la única biblioteca institucional a enorme escala que se sabe que ha sobrevivido A partir de la antigüedad en Egipto: la biblioteca del templo de Tebtunis. Las muestras estudiadas en este proyecto de investigación son, Según los autores, excepcionales, no Solo Porque proceden de la conocida biblioteca, Sino que De la misma forma Porque el análisis añade hasta doce fragmentos de papiro egipcio antiguo, todos inscritos con tintas rojas y negras. «Al aplicar tecnología punta del siglo XXI para revelar los secretos ocultos de la tecnología de tinta antigua, estamos contribuyendo a desvelar el origen de las prácticas de escritura», explica Marine Cotte, científica de la ESRF y coautora del artículo acerca de el descubrimiento que se publica este lunes en la revista PNAS. Al igual que en el Renacimiento
«Algo muy llamativo fue que encontramos que se agregaba plomo a la mezcla de tintas, no Al igual que tinta, Sino más bien más bien que De La misma manera que secador de la tinta, a fin de que la tinta se quedara en el papiro», dice Cotte. Los estudiosos llegaron a esta conclusión Ya que no encontraron ningún otro tipo de plomo, De esta manera como el blanco de plomo o bien el minio, que tendría que estar presente si se usara plomo Al idéntico que pigmento. «El hecho de que el plomo no se haya añadido Del mismo modo que pigmento Sino más bien más bien De esta forma tal y como secador infiere que la tinta tenía una receta bastante compleja y no podía ser hecha por cualquiera», agrega Thomas Christiansen, egiptólogo de la Universidad de Copenhague y Asimismo coautor del estudio. Un hecho sorprendente, mantienen los científicos, es que la receta de la tinta se puede relacionar con las prácticas de pintura desarrolladas muchos siglos más tarde A lo largo de el Renacimiento. «En el siglo XV, En el momento en que los artistas redescubrieron el óleo en Europa, el desafío era secar el óleo en un tiempo razonable», dice Marine Cotte. «Los pintores se dieron cuenta de que ciertos compuestos de plomo podrían utilizarse Del mismo modo que secadores eficientes», explica. Rojo ocre
En el análisis, los investigadores utilizaron Varios técnicas de sincrotrón (micro fluorescencia de rayos X, micro difracción de rayos X y espectroscopia microinfrarroja) para sondear la composición química de las tintas A partir de la escala milimétrica hasta la submicrométrica. Los científicos descubrieron que el plomo estaba asociado a distintos elementos: una mezcla compleja de fosfatos de plomo, sulfatos de plomo de potasio, carboxilatos de plomo y cloruros de plomo. Del mismo modo que era de aguardar, los científicos hallaron que el color rojo de la tinta viene dado por el ocre. Más sorprendentemente, encontraron que este pigmento rojo está presente Al parecido que partículas gruesas al tiempo que los compuestos de plomo se difunden en células de papiro, a escala micrométrica, envolviendo las paredes celulares y creando, a escala de las letras, un efecto de anillo de café alrededor de las partículas de hierro, Asimismo que si es que las letras estuvieran delineadas. «Creemos que el plomo debe haber estado presente en un molido fino y tal vez en un estado soluble y que en la fecha se aplica, las partículas grandes permanecen en su sitio, Mientras que las más pequeñas se ‘difunden’ a su alrededor» explica Cotte. En estos halos, el plomo está asociado con azufre y fósforo. El origen de estos sulfatos y fosfatos de plomo, es decir, si es que estaban inicialmente presentes en la tinta o se formaron A lo largo de su variante, Aún es un enigma.
