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Sitúan el origen de la enigmática señal de radio «Wow!» en una estrella Al parecido que el Sol

A la hora de pensar en la búsqueda de inteligencia extraterrestre, muchos olvidan lo gran que es la labor. En la galaxia existen del orden de 200.000 millones de estrellas, muchas con sus respectivos planetas. Si es que alguna civilización enviase ondas de radio o de otra longitud de onda A partir de alguno de estos mundos, las señales podrían necesitar hasta decenas de miles de años para atravesar una comunicado de la galaxia. Si es que se piensa, semeja que la escala es demasiado grande: la especie humana tiene unos 200.000 o 300.000 años, No obstante la civilización tecnológica, con capacidad de enviar o bien percibir ondas electromagnéticas al espacio, tiene menos de dos siglos. Así pues: ¿cuál es la probabilidad de que se dé la coincidencia y dos civilizaciones estén escuchando simultáneos y puedan comunicarse? El 15 de agosto de 1977 por un instante pareció que el «milagro» había acontecido. El radiotelescopio Big Ear, en Delaware, Ohio, EEUU, detectó una potente señal de radio de 72 segundos. Un par de días a continuación, el astrónomo voluntario Jerry Ehman observó la impactante señal entre los data. Cualquier persona Solo habría leído un galimatías, No obstante Ehman interpretó la presencia de una clara señal, que empezaba con poca intensidad, subía y que caía en picado, todas ellas circunstancias que sugerían que algún objeto lejano y puntual, ubicado en el cielo, en la región ocupada por la constelación de Sagitario, había atravesado el sitio del detector. Los datos le sorprendieron tanto que anotó la palabra «Wow!», con un bolígrafo rojo, junto a la breve secuencia de letras y números 6EQUJ5. Los astrónomos se lanzaron a comprobar si es que la señal «Wow!» continuaba ahí, Pero no tuvieron éxito: fuera lo cual fuese lo que la produjo, no retornó a repetirse. Se propusieron muchas explicaciones, entre ellas su origen en una civilización extraterrestre, y se buscó Durante más de dos décadas. ¿Qué desencadenó la señal «Wow!» y por qué jamás se repitió? ¿Qué provocó la señal «Wow!» y por qué jamás se repitió? Esta pregunta tal vez no se responda jamás, No obstante Aún Hoy se publican artículos que intentan arrojar alguna luz. De hecho, esta semana una investigación aún no revisada por pares se ha publicado en el servidor de prepublicaciones «ArXiv». Su premisa es buscar en la base de data de estrellas de la sonda Gaia, que está construyendo un catálogo con 1.700 millones de estrellas, y buscar los exoplanetas que podrían habría originado la señal «Wow!». En busca de un gemelo del Sol
El astrónomo amateur Alberto Caballero ha buscado el escenario más plausible, Basándonos en la patentiza acumulada hasta ahora: dicho de otro modo, que si se ha de ir en búsqueda de una civilización inteligente, se busque un planeta igual a la Tierra en la órbita de una estrella comparable al Sol. De ahí que, ha analizado cuáles de las miles de estrellas situadas en la zona de Sagitario, donde se situó la señal «Wow!», podría encajar con ese «retrato robot». En suma, Caballero ha evaluado la naturaleza de 66 estrellas de tipo G (Del mismo modo que el Sol), Pero ha concluido que Solo hay indicios suficientes para afirmar que una es idéntico al Sol. Su nombre no es muy fácil de recordar, En tanto que es 2MASS 19281982-2640123, Pero, Según este astrónomo aficionado, debería ser un blanco prioritario para buscar planetas potencialmente habitables, dicho de otro modo, que potencialmente albergarían agua líquida en superficie. Aparte de esto, el astrónomo ha destacado otras 14 estrellas que podrían ser de tipo G, No obstante cuya datos sobre luminosidad y radio es demasiado incompleta De La misma manera que para poder asegurarlo a ciencia cierta. Una señal entre cientos
Conviene rememorar que el hallazgo de la señal «Wow!» se provocó en los 70, una década en la que hubo una 1era ebullición de la busca de inteligencia extraterrestre. Por ejemplo, se dirigió en 1974 En el momento en que Frank Drake y Carl Sagan enviaron el mensaje de Arecibo, una señal de dos minutos destinada a posibles alienígenas habitantes en el cúmulo M13, a 25.000 años luz de distancia (en seguida, este mensaje tiene por delante unos 24.944 años de viaje). Con el tiempo, la señal «Wow!» se ha convertido en un mito que interesa más a los aficionados que a los propios astrónomos. Conforme indicó Seth Shostak, astrónomo senior del Colegio SETI (de Busca de Inteligencia Extraterrestre), para «Astronomy.com», ésta no es más que una entre otras muchas señales. «En aquellos días, era muy común atraer ese tipo de señales Sólo una vez», en palabras de Shostak. «Los ordenadores no tenían la capacidad de hacer seguimientos». Si bien, Cuando los ordenadores mejoraron, el número de señales misteriosas cayó en picado. «Los alienígenas sabían que teníamos mejores equipos», bromeó el astrónomo. Pero, algo tan fortuito Del mismo modo que el que Jerry Ehman bautizase a esta señal Asimismo que «Wow!», la hizo muy célebre. «Por lo menos una vez al mes A mí me llega un correo de alguna persona que analiza esos data de todas y cada una las maneras posibles», continuó Seth Shostak. Muchos interpretan que la señal es Claramente un mensaje alienígena dirigido a la humanidad, sin divisar que las letras y los números 6EQUJ5 son resultado de las convenciones de los astrónomos del observatorio de Big Ear. Caso de que fuera un mensaje extraterrestre, no hay manera de saber qué pudo decir.