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Una gigantesca tormenta en Neptuno cambia bruscamente de dirección y los astrónomos no saben por qué

Una oscura y enorme tormenta que los astrónomos llevaban años observando en Neptuno termina de hacer algo desconcertante: en contra de todo pronóstico, ha cambiado bruscamente de dirección, maniobra Debido a la que, Asimismo, ha conseguido evitar una muerte segura. El sistema tormentoso fue observado Por primera vez por el Telescopio Espacial Hubble en 2018. Un año más tarde, el vórtice arrancó a derivar hacia el sur, dirigiéndose hacia el ecuador del mundo gigante, el mismo comportamiento observado en tormentas precedentes. Normalmente, estas manchas oscuras en Neptuno duran ciertos años Ya antes de disolverse y desaparecer. No obstante, esta tormenta en concreto hizo algo totalmente distinto. De repente, detuvo su avance cara el sur y dio media vuelta para retornar a dirigirse al norte. Al mismo tiempo, los astrónomos pudieron ver de qué forma surgía una 2da mancha, más niña, en el planeta. Los investigadores Creen que puede tratarse de un fragmento del vórtice original que se dividió y comenzó a alejarse por su cuenta. «Estamos entusiasmados con estas observaciones —afirma Michael H. Wong en un Solo comunicado hecho público por la NASA—, por el hecho de que este fragmento oscuro más pequeño es potencialmente una parte del proceso de interrupción del avance de la mancha oscura. Este es un proceso que jamás se había observado Ya antes. Hemos visto Algunas otras manchas oscuras desvaneciéndose hasta desaparecer, Pero jamás nada Al semejante que esto». Una tormenta mayor que el Atlántico
De hecho, Aunque el Hubble lleva ya 30 años rastreando tormentas en Neptuno, nunca hasta entonces había observado un comportamiento atmosférico tan sorprendente. La tormenta, que es mayor que el Océano Atlantico (tiene 7.403 kilómetro de diámetro), es la cuarta más oscura de las que el Hubble ha rastreado Desde 1993. Estas tormentas son sistemas de alta presión que giran en el sentido de las agujas del reloj (al revés que en la Tierra, donde los huracanes son sistemas de baja presión que giran en sentido contrario a las agujas del reloj), a causa a la rotación del planeta. En general, a medida que esas tormentas derivan cara el ecuador de Neptuno, el efecto Coriolis (que las sostiene estables) inicia a debilitarse hasta que la tormenta se desintegra. Si es que bien, y a diferencia de las demás, esta gran tormenta no alcanzó hasta esa «zona de muerte». «Fue verdaderamente emocionante —asegura Wong— ver a ese huracán actuar Al igual que se supone que debe hacerlo, hasta que de repente se detuvo y retrocedió. Se dirigió muy sorprendente». Otro punto oscuro
La detección de la segunda tormenta, más pequeña, surgida del vórtice mayor De la misma forma resultó sorprendente. Los astrónomos se refieren a ella Al igual que «punto oscuro junior», Si bien su tamaño, 6.276 kilómetro, Además es considerable. Con todo, los estudiosos no han conseguido vivenciar que, efectivamente, la tormenta más chiquita se separó de la grande. Según Wong, si verdaderamente se dirigió De este modo, eso bastaría para explicar el súbito cambio de dirección. Si no, va a haber que buscar otra explicación. La gran tormenta es, Indudablemente, la mejor estudiada Hasta ahora en Neptuno. En el instante el Hubble la reveló en 2018, alrededor del vórtice había tres otras nubes brillantes, que desaparecieron En el momento en que el vórtice arrancó su marcha cara el sur. Lo cierto es que las tormentas de Neptuno guardan Todavía una buena parte de sus secretos. Descubrirlos es, precisamente, El propósito del programa Outer Planet Atmospheres Legacy (OPAL) de la NASA. Y ahora, los astrónomos se han encontrado con un misterio más para solucionar.