Los casos de Covid-19 al alza, el caos dejado por el paso de la borrasca Filomena, la terrible explosión de un edificio en la calle Toledo… Con La capital de España sufriendo una de las peores rachas que se recuerdan, el paso A lo largo de la madrugada de Ayer de una enorme bola de fuego acerca de la ciudad podría parecer la tragedia que le faltaba, Sin embargo, De exactamente la misma forma que suele ser típico con estos fenómenos, Solo se ha quedado en una novedad para ciertos (pocos) noctámbulos -fue tan luminosa que se pudo observar Desde casi cualquier punto de la península- y un caso de estudio para los astrónomos. A las 3.56 horas de la madrugada del jueves el observatorio del Complejo Astronómico de La Hita detectó el impacto contra la atmosfera de una roca a 126.000 kms por hora que explotó De La misma manera que una enorme bola de fuego. El fenómeno pudo ser grabado por los detectores que la Red de Bólidos y Meteoros del Suroeste de Europa opera en el complejo. Estos detectores trabajan en el marco del Proyecto SMART, que se desarrolla A partir del Colegio de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) con El propósito de monitorizar continuamente el cielo para registrar y estudiar el impacto en contra de la atmosfera terrestre de rocas procedentes de distintos objetos del Sistema Solar. El paso de la roca De la misma forma se dirigió filmado por los detectores que este mismo proyecto de investigación tiene instalados en los observatorios de Calar Alto (Almería), La Sagra (Granada) y Sevilla.<iframe width=”100%” height=”349″ src=”https://www.youtube.com/embed/4GAyWJoMzT8″ frameborder=”0″ allow=”accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture” allowfullscreen></iframe> El investigador responsable del Proyecto SMART, el astrofísico José María Madiedo, del Instituto de Astrofísica de Andalucía, cree que la roca entró en la atmosfera sobre el oeste de la Comunidad de La villa de Madrid. Gracias a su elevada velocidad, el brusco rozamiento con el aire hizo que se volviese incandescente a una altura de unos 84 kilómetros prácticamente en el límite con la provincia de Ávila. La bola de fuego, que mostró varias explosiones por medio de su trayectoria, pasó en dirección sudeste y se extinguió acerca de la ciudad de La capital española a una altitud de unos 21 kilómetros, prácticamente sobre la vertical del barrio de Puente de Vallecas. Según Madiedo, la tipo de órbita que llevaba la roca prueba que procede de un asteroide. La bola de fuego se dirigió tan luminosa que pudo ser vista Desde más de 600 kilómetros de distancia. prácticamente en toda España, donde los cielos no estuvieran nublados. Por desgracia, ese no se dirigió la ocación de Madrid, cubierta de nubes. El estudioso recibió el amenaza de avistamiento de ciertos particulares, Si bien, reconoce, A partir de la imposición del toque de queda para luchar contra la pandemia esta clase de fenómenos apenas tienen testigos. Otra consecuencia más e inesperada del Covid-19.