Un elenco científico liderado por investigadores del Centro de Astrobiología (CAB, CSIC-INTA), ha trazado el mapa más detallado hasta la fecha de estrellas masivas azules de la vecindad solar, descubriendo en él una estructura oculta, bautizada Tal y como el espolón de Cefeo. Dicha estructura se extiende sobre el plano galáctico conectando el brazo espiral de Orión con el de Perseo. Las estrellas azules masivas (Asimismo conocidas Como estrellas OB) tienen una peculiaridad que las hace especialmente interesantes para los astrofísicos: tienen una vida efímera de pocos millones de años. De esta forma, igual que la datación de las rocas revela el nivel de actividad geológica de un mundo, la presencia de estrellas OB en la Vía Láctea es un indicador de la actividad en nuestra galaxia, Puesto que nos revelan zonas de formación estelar. Allí donde las encontramos podemos decir que la galaxia está «viva», pues se están formando nuevas estrellas. Además sucede que estas estrellas de vida breve no tienen tiempo de alejarse de las regiones donde nacen, los brazos espirales, por lo cual resultan formidables referencias para trazar un mapa de esas estructuras galácticas. Con este objetivo, un club de investigadores comandado por el Centro de Astrobiología (CAB, CSIC-INTA) ha realizado una exhaustiva actualización del catálogo ALS (de Alma Luminous Stars), el mayor catálogo existente de estrellas OB masivas de nuestra galaxia, que cuenta con casi 20.000 objetos. A lo largo de meses, los estudiosos han cruzado los antiguos información de cada estrella con los datos últimamente conseguidos con la misión Gaia de la ESA, obteniendo un catálogo completamente actualizado. Los nuevos data, recientemente publicados en la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society (MNRAS), han permitido al Plantel trazar por vez 1era el mapa más detallado de los brazos espirales de la Vía Láctea. Por arriba del plano galáctico
El mapa es tan exacto que ha permitido al elenco científico encontrar algo que nadie había visto hasta ahora: un ramal de nuestro brazo espiral (el de Orión) de unos 10.000 años-luz de longitud que se extiende cara afuera en dirección al siguiente brazo (el de Perseo), elevándose También por encima del plano de la Galaxia. Los investigadores han bautizado a esa nueva estructura descubierta «el espolón de Cefeo»: espolón por el hecho de que es Como se denominan este tipo de estructuras entre brazos y de Cefeo por el hecho de que es la constelación donde es más prominente. «Es interesante señalar que la ingente volumen de data logrados con la misión Gaia y el manipulación de herramientas estadísticas ha permitido quitar interesantes conclusiones generales sobre nuestro Ambiente, Del mismo modo que indicios del alabeo de nuestra galaxia (De exactamente la misma forma que un tablón que se ha combado por la humedad) y las corrugaciones (contracciones) del disco, que son tal vez reliquias de la convulsa evolución de la Vía Láctea», dice Michelangelo Pantaleoni, investigador del CAB y autor primordial del estudio.