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Victoria del segundo lanzamiento de la nave reutilizable Crew Dragon con cuatro astronautas a bordo

Tras un retraso de 24 horas por el mal tiempo, la segunda misión tripulada a bordo de la Crew Dragon despegaba A partir de Cabo Cañaveral de manera puntual, a las 11.52 hora peninsular. Y prácticamente Del mismo modo que un baile acompasado, todos y cada uno de los pasos salían Conforme lo planeado: A partir de un increíble lanzamiento que coloreaba de amarillo y naranja el cielo con Ciertas nubes sobre Florida; a la sincronización entre el instante en el que la cápsula con los cuatro tripulantes a bordo alcanzaba la órbita terrestre Entre tanto, a la vez, el cohete Falcon 9 realizaba un amerizaje perfecto sobre el navío ‘Of Course I Still Love You’, que quiere decir «por supuesto que te sigo queriendo» en inglés, un nombre ideado por el Siempre y en todo momento y en toda circunstancia polémico Elon Musk. Él es el fundador de SpaceX, la empresa en la que la NASA ha colocado gran parte de sus expectativas no Solo para desamparar de depender de las naves Soyuz rusas en el transporte de astronautas a la Estación Espacial Internacional (ISS), Sino más bien más bien para poner en marcha su ambicioso programa Artemis y retornar a llevar al hombre (y a la 1era mujer) a la Luna. Y, de ahí, a Marte. Varios factores hacían de este un lanzamiento especial: tanto la cápsula De exactamente la misma manera que el cohete, ideados por SpaceX, serían reutilizados por 2da vez en una misión oficial; Por primera vez viajarían cuatro astronautas, llenando todos los asientos de la Crew Dragon; y entre los integrantes de la tripulación, había dos socios internacionales, uno de ellos un europeo. Los cuatro astronautas a bordo (Shane Kimbrough y Megan McArthur, de la NASA; Akihiko Hoshide, de Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón; y el francés Thomas Pesquet, de la Agencia Espacial Europea) se mostraban sonrientes Ya antes de poner rumbo a la ISS, donde permanecerán seis meses. Allá realizarán diferentes experimentos en gravedad cero hasta la fecha en que regresen a casa, el 31 de octubre. Reutilizando los vehículos La cápsula Crew Dragon, que se dirigió bautizada por sus primeros tripulantes, los astronautas estadounidenses Bob Behnken y Doug Hurley, De exactamente la misma manera que Endeavour, ha pasado una serie de pruebas Ya antes de volver a ser reutilizada. El Endeavour permaneció atracado en la ISS A lo largo de dos meses Antes de volver a la Tierra en agosto de 2020, Cuando aterrizó de manera exitosa en el Golfo de México. Tras ser recuperada por SpaceX, la compañía llevó a cabo intensas inspecciones para reacondicionarla y ponerla en perfectas condiciones Antes del viaje de la misión Crew-2. Durante los exámenes se ubicaron imperfecciones en el escudo térmico más graves de lo esperado, Si bien estas partes han sido reemplazadas para las nuevas maniobras. a su vez, se llevaron a cabo trabajos adicionales en el casco de la nave y se cambiaron las válvulas internas que requerían ser cambiadas. Ahora de estas pruebas, la Endeavour se dirigió transportada a Cabo Cañaveral para pasar más exámenes Al semejante que pruebas de interferencia electromagnética, verificación acústica y de sistemas. Experimentos en gravedad cero
Los astronautas de la Crew-2 se unirán a los otros miembros de la Expedición 65, el astronauta de la NASA Mark Vande Hei y los cosmonautas Oleg Novitskiy y Pyotr Dubrov, de Roscosmos, para una misión de seis meses que llevará a cabo experimentos científicos en órbita terrestre baja. Un ejemplo de estos experimentos son las pruebas con pequeños microchips de tejido, que son modelos de órganos humanos con Varios géneros de células artificiales que se comportan de manera idéntico a las naturales. Estos chips pueden avalar identificar terapias seguras y efectivas (medicamentos o vacunas) mucho más rápidamente que el proceso estándar aprovechando que en gravedad cero el cuerpo humano sufre una aceleración del envejecimiento y de la progresión de las enfermedades. «Los científicos usan chips de tejido especializados en el espacio para modelar enfermedades que afectan órganos específicos del cuerpo humano, Sin embargo que pueden tardar meses o años en desarrollarse en la Tierra». «Sabemos que las células se comunican entre sí y que esta comunicación es fundamental para el funcionamiento adecuado», dice Liz Warren, directora senior de programas del Laboratorio Nacional de EE. UU. de la ISS. «No entendemos completamente por qué, No obstante en microgravedad, la comunicación de célula a célula funciona de manera distinto a Del mismo modo que Lo efectúa en un matraz de cultivo teléfono en la Tierra. Las células También se agregan o se juntan de forma distinto en microgravedad. Estas características dejan que las células se comporten más Al idéntico que lo hacen en el momento están dentro del cuerpo. En consecuencia, la microgravedad parece brindar una oportunidad única para la ingeniería de tejidos».