Ahora de tres años de viaje, la misión BepiColombo, fruto de la colaboración entre Europa y Japón, ha llegado por fin a Mercurio para llevar a cabo la primera de las seis maniobras previstas de gravedad asistida en el mundo. Y A partir de allá ha aprovechado para enviar a la Tierra su primera imágen, en blanco y negro y con una Decisión de 1024 x 1024 píxeles. Aunque la nave llegó a acercarse hasta Sólo 199 km de parte superficial, lo hizo en el lado nocturno del mundo, por lo cual no pudo tomar fotografías. La que vemos se dirigió captada en otro instante más favorable y a una distancia de 2.418 kilómetro. La región mostrada en la imagen forma comunicado del hemisferio norte de Mercurio, el planeta más próximo al Sol del Sistema Solar, y en ella se aprecia la región de Sihtu Planitia, inundada por lavas. Un área redonda menos escarpada y más brillante corresponde a las llanuras de Rudaki, cerquita de del cráter Calvino. En la fotografía Además se percibe el cráter Lermontov, de 166 km de ancho, cuyo brillo se tiene que a que contiene una serie de características únicas de Mercurio llamadas ‘huecos’, A partir de los cuales los elementos volátiles escapan al espacio. El cráter Asimismo contiene un respiradero en el que en el pasado se han producido explosiones volcánicas. A lo largo de su misión, BepiColombo estudiará estas y otras muchas de las peculiaridades físicas del mundo. “El sobrevuelo fue perfecto A partir del punto de vista de la nave espacial -explica Elsa Montagnon, gerente de operaciones de la misión- y es espectacular ver Finalmente nuestro planeta objetivo”. Un mundo misterioso
Según la Agencia Espacial Europea (ESA), la misión BepiColombo estudiará todos y cada uno de los aspectos de este aún misterioso planeta, Desde su núcleo hasta los procesos que se dan en su superficie, a su vez del lugar magnético y la exosfera. La meta, Conforme la ESA, es “comprender mejor el origen y la evolución de un mundo tan próximo a su estrella madre”. Mercurio y la Tierra son Ambos únicos planetas rocosos del Sistema Solar que disponen de un ámbito magnético. En nuestro planeta los campos magnéticos son generados por la rotación de un núcleo líquido, Pero dado su tamaño, a estas alturas Mercurio tendría que haberse vuelto frío y completamente sólido, tal y De exactamente la misma forma que hizo Marte. Según los científicos, esta anomalía podría deberse a alguna característica todavía no famosa en la composición del núcleo de Mercurio, algo que El instrumental de BepiColombo medirán con mucha mayor precisión de lo cual ha sido posible hasta en seguida. En cuanto a su superficie, Mercurio es Sin duda un planeta extremo, con temperaturas que pueden oscilar entre los 430 grados centígrados Durante el día a los 180 grados bajo cero de la noche. Días y noches, por cierto, que duran casi tres meses terrestres cada uno. A pesar de su cercanía al Sol, misiones precedentes ya hallaron evidencia de hielo en los recovecos más profundos de los cráteres polares del mundo. Los científicos especulan que ese hielo podría proceder de impactos de cometas contra la superficie de Mercurio. La misión tratará de lograr más información Al respecto. Un viaje complicado
Sin embargo, el viaje de BepiColombo Aún no ha terminado. Antes de estabilizar su órbita alrededor de Mercurio, algo que no deberá lugar hasta 2025, la nave tendrá que ejecutar otros cinco sobrevuelos del mundo, siguiendo una complicada trayectoria que, En oportunidades, la llevará hasta más allá de Venus y de la propia Tierra. De hecho, el viaje encierra una gran complejidad. No es posible mandar directamente una nave a Mercurio, En tanto que la atracción del Sol es tan duro que se necesitaría una gran maniobra de frenado para situar el satélite con triunfo, algo que requeriría mucho más combustible del que BepiColombo puede transportar. De ahí que, las maniobras de gravedad asistida en la Tierra, Venus y el propio Mercurio, permitirán que BepiColombo reduzca su velocidad de forma natural A través de su viaje. En medio los siete años de duración total del viaje (Solo han pasado tres), BepiColombo realizará nueve sobrevuelos: uno en la Tierra, dos en Venus y seis en Mercurio, en seguida de lo cual va a poder alcanzar, ya en 2025, su posición orbital definitiva. A partir de en seguida, por el hecho de que, quedan aún prácticamente cinco años para llenar la misión.