Ir al contenido

¿Pueden estar las señales de radio de estrellas distantes revelando planetas ocultos?

Utilizando la antena de radio más poderosa del planeta, los científicos han descubierto que Ciertas estrellas que emiten ondas de radio inesperadamente. Y, posteriormente del desconcierto inicial, los astrónomos de la Universidad de Queensland (Australia) han relacionado este fenómeno con la posible existencia de planetas ocultos en esos sistemas estelares. Los resultados se acaban de publicar en la gaceta ‘Nature Astronomy’. El club del astrónomo Benjamin Pope y sus colegas, del observatorio nacional holandés ASTRON, han estado buscando planetas utilizando el radiotelescopio de baja frecuencia (LOFAR) más poderoso del planeta situado en los Países Bajos. «Hemos descubierto señales de 19 estrellas enanas rojas distantes, cuatro de las cuales se explican mejor por la existencia de planetas que las orbitan», asevera Pope. A partir de hace tiempo se conoce que los planetas de nuestro Sistema Solar emiten poderosas ondas de radio en el momento sus sectores magnéticos interactúan con el viento solar. Aunque, las señales de radio de los planetas fuera de nuestro vecindario cósmico todavía no se han captado. «Este descubrimiento es un paso esencial para la radioastronomía y podría potencialmente conducir al descubrimiento de planetas en toda la galaxia». Previamente, los astrónomos Sólo podían ubicar las estrellas más cercanas en una emisión de radio constante, y todo lo demás en el cielo que emanaba estas señalas eran o gas interestelar o bien agujeros negros. Sin embargo con la nueva tecnología, mucho más sensible, se puede hacer mucho más: el Plantel se centró en las enanas rojas, un tipo de estrella mucho más pequeño que el Sol, No obstante que tienen una intensa actividad magnética que impulsa llamaradas estelares y emisiones de radio. Pero, Durante el reconocimiento Asimismo se localizaron Ciertas estrellas antiguas, magnéticamente inactivas, Sin embargo que emitían señales de radio, desafiando la comprensión convencional. Joseph Callingham de la Universidad de Leiden y ASTRON y intérprete y escritor principal del descubrimiento, explica que el club piensa que estas señales provienen de la conexión magnética de las estrellas y sus planetas en órbita invisibles, similar a la interacción entre Júpiter y su luna, Io. «Nuestra propia Tierra tiene auroras, comúnmente históricas aquí En este sentido tal y como las luces del norte y del sur, que También emiten poderosas ondas de radio. Esto se debe a la interacción del campo magnético del planeta con el viento solar -afirma Callingham-. No obstante en la ocación de las auroras de Júpiter, son mucho más fuertes Porque su luna volcánica Io está lanzando material al espacio, llenando el Ambiente de Júpiter con partículas que impulsan auroras inusualmente poderosas». Así, Según el modelo holandés, el fenómeno que ocurre con Júpiter e Io se ampliaría en estas ‘viejas’ estrellas, «con un planeta envuelto en el campo magnético de su estrella, alimentando material en vastas corrientes que igualmente alimentan auroras brillantes». «Es un espectáculo que ha atraído nuestra atención Desde años luz de distancia». El próximo paso será confirmar que, en efecto, estos planetas propuestos existen. «No podemos estar 100 % seguros de que las cuatro estrellas que creemos que tienen planetas son En verdad huéspedes de planetas, Sin embargo podemos decir que una interacción planeta-estrella es la mejor explicación de lo cual estamos viendo», apunta Pope. «Las observaciones de seguimiento han descartado planetas más masivos que la Tierra, Pero no hay nada que diga que un planeta más pequeño no podría generar este fenómeno». Los descubrimientos con LOFAR son Sólo el arranque. Y jamás mejor dicho, pues este telescopio Solo tiene la capacidad de monitorear estrellas que están parcialmente cerca, hasta 165 años luz de distancia. Si es que bien, con equipos más potentes, Así tal y como el radiotelescopio Square Kilometer Array de Australia y Sudáfrica, en seguida en construcción y previsto para comenzar con su tarea en 2029, el club predice que podrán ver cientos y cientos de estrellas relevantes a distancias mucho mayores.