Ir al contenido

Mujeres en el espacio: logros y horizontes infinitos.

Mujeres en el espacio: logros y horizontes infinitos.


Las mujeres en el espacio: un viaje de logros y nuevos horizontes

En un famoso dicho chino se dice que “cuando todas las personas recogen leña, se puede hacer un gran fuego”. Este proverbio resalta la importancia de la cooperación internacional, y se aplica perfectamente al campo de la exploración espacial. Como lo expresó la astronauta china Liu Yang, la colaboración internacional es necesaria para avanzar en el desarrollo de los vuelos espaciales y la exploración del espacio.

Desde el lanzamiento de la cosmonauta soviética Valentina Tereshkova en 1963, hasta la actualidad, 75 mujeres han volado en el espacio. Estas mujeres han realizado importantes contribuciones a la investigación y han allanado el camino para futuras misiones espaciales. Además, muchas otras mujeres han participado en la construcción de la Estación Espacial Internacional y en la investigación diaria realizada en ella. Incluyendo a mujeres en roles clave fuera de la órbita terrestre, como directoras de centro, administradoras y directoras de vuelo, se ha logrado avanzar en la exploración espacial y en los esfuerzos de la NASA para aterrizar a la primera mujer y a la primera persona de color en la Luna, así como enviar las primeras tripulaciones a Marte en las próximas décadas.

Desde Valentina Tereshkova hasta las mujeres pioneras que la precededieron en ingresar al espacio, estas mujeres han dejado una marca indeleble en la historia. En enero de 1978, la NASA seleccionó a seis mujeres astronautas para el programa de transbordadores espaciales. Menos de cinco años después, en junio de 1983, Sally Ride se convirtió en la primera mujer estadounidense en el espacio. Desde entonces, muchas otras mujeres han seguido sus pasos, estableciendo récords y rompiendo barreras.

La presencia de mujeres en el espacio ha crecido gradualmente a lo largo de los años. En enero de 1992, Roberta Bondar se convirtió en la primera astronauta canadiense en ingresar al espacio. En septiembre de 1992, Mae Jemison se convirtió en la primera mujer africana americana en el espacio. Y en abril de 1993, Ellen Ochoa se convirtió en la primera mujer hispana en el espacio. Estos logros históricos abrieron el camino para que más mujeres ingresaran al campo de la exploración espacial.

Uno de los hitos más significativos en la historia de las mujeres en el espacio ocurrió en octubre de 2019, cuando Jessica Meir y Christina Koch llevaron a cabo el primer paseo espacial realizado exclusivamente por mujeres. Este hito marcó un momento importante en la igualdad de género en el campo de la exploración espacial y demostró que las mujeres están desempeñando un papel cada vez más importante en el avance de la ciencia y la tecnología.

En la actualidad, la presencia de mujeres en el espacio continúa creciendo. En marzo de 2021, Shannon Walker se convirtió en la primera mujer en viajar en un vehículo de tripulación comercial, y en octubre de 2022, Samantha Cristoforetti se convirtió en la primera mujer europea en comandar la estación espacial. Estos son solo algunos ejemplos de las numerosas y valiosas contribuciones que las mujeres están haciendo al campo de la exploración espacial.

La presencia de mujeres en el espacio es una prueba tangible de que las barreras de género están siendo derribadas y que las mujeres están ocupando un lugar legítimo en el campo de la ciencia y la tecnología. A medida que avancemos en el futuro, es de vital importancia seguir fomentando y apoyando la participación activa de mujeres en la exploración espacial. Como dijo Sally Ride, si queremos científicos e ingenieros en el futuro, debemos cultivar a las niñas tanto como a los niños. Solo a través de la participación activa de mujeres en el campo de la exploración espacial podremos alcanzar nuevas fronteras y expandir nuestros horizontes más allá de lo que jamás hemos imaginado.

El futuro del espacio es femenino, y juntos podemos hacer grandes cosas.